Llevo 48h. en un constante pienso compuesto de chocolates, mazapanes, polvorones, caramelos, pipas, quicos y bollos variados. Siento como mi páncreas pide clemencia, pero a la vez no puedo parar. Es más que posible que sea falta de sexo. Me he mirado un rato al espejo para ver si ya voy teniendo el rictus de los malfollaos, pero por ahora me sigo viendo igual que antes. Aún así me vigilaré. Uno empieza por no tener orgasmos, y termina con una recortada encima de un tejadillo disparando al vecindario. Hay que tener cuidadito con esas cosas. Eso sí... para no hacer sexo, estoy dando por culo cosa fina. No hay forma de que me sintonice con los demás en el puñetero villancico. En serio. De verdad. Cada vez estoy más cerca de ser el chico tachinda-chinda. Y lo peor es Simón. Todo emocionado diciéndole a media España que voy a "salir en el villansico del cole."