Ventiyá y Pedro

Estoy muy nervioso y escribir me calma, así que voy a tomarme este post como un trozo de autoterapia. Nos han retrasado la hora de visita al centro, y todavía me quedan un par de horas. Voy a presentar a Pedro. Pedro tiene 9 años. Síndrome de Asperger y sordo, debido a una meningitis neonatal. Se le implantó el dispositivo coclear cuando cumplió seis años, pero lo rechaza y se lo desconecta. Simplemente, no quiere oír. No es agresivo con el entorno, pero cuando algo le angustia se autolesiona. No tiene problemas con los estudios y sí con la escolarización, porque, aunque se adapta a las pautas y los horarios con una precisión germana, es incapaz de relacionarse con los demás. Debido a sus rechazos al implante, tiene dificultades de vocalización. Prácticamente, no habla, y apenas se comunica con lenguaje de signos. No porque no sea capaz de coordinarlo, que lo hace perfectamente, sino porque simplemente, no quiere comunicarse con nadie. Vive aislado de todo y de todos y no ha sido capaz de adaptarse a ninguna de las acogidas que ha tenido. Nosotros somos su tercer intento. Matraka, Asesino y Birra nos han convertido en la mejor opción.

Así que... vamos allá, Pedro.